El canto del fístulo
EL CANTO DEL FÍSTULO: ASALTO CARNAL A LA POESÍA
La poesía huele a sexo, a leche de mujer, a cogedera. El pornócrata mayor y su nena en turno nos
encaminan a lechos suaves, camas de piedra, camas de clavos y a mirarlos en
imágenes que calientan el espíritu.
El canto del fístulo es un territorio donde zorra-vagina y
verga-fístulo comulgan en los poemas y en las develaciones de Alberto Vargas
Iturbe. "Mi fístulo", poema que inicia esta lírica vital manifiesta
el calibre del autor (17 cm), la pornografía es sólo el pretexto para hablar
con Dios, para rendirle cuentas, todo pretexto es válido cuando se busca al
espíritu original que habita en cada ser, así el autor habla con su madre,
consigo mismo, con los elementos de la naturaleza.
Edson Mateos Alvarado
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